Panadería de Ayerbe, 9:00 de la mañana. ¡Que ricas las caracolicas!
Entre perros y flautas salimos a las 9:30 hacia Aisa, a ver hasta donde podemos llegar por la pista. De calentamiento nos toca empujar los coches (casi se está convirtiendo en rutina) y nos dan las 12 cuando calzamos focas pista p'arriba, al tiempo que baja el primer grupo de esquiadores. Al poco nos encontramos la avalancha que corta el camino en una curva, dicen que cae todos los años. Terminada la pista remontamos por la cuerda con nieve ya un poco dura, pasamos el desvío del embudo hacia el Aspe, hasta aquí nuestros amigos cuadrúpedos desprovistos de focas avanzan sin problemas haciendo tres veces más nuestro recorrido.
A partir de ahora la cosa se complica por la nieve helada y la mayor pendiente, llegamos a una pequeña hoya y el grupo se divide: tres van para arriba a intentar asomarse a la Gaba d'Esper desde el collado y el resto vuelven hacia el fondo del valle o barranco de Igües para explorar más territorio esquiable, hacer más asequible la excursión perruna y de paso entrenarlos en la caza de sarrios (vaya susto..)
Los intrépidos que van hacia la cima ponen cuchillas y a pocos metros de alcanzar el collado deciden retirarse, es tarde y la nieve no nos deja avanzar con esquis. así que pabajo, al reencuentro con el resto que nos esperan unos huevos fritos de corral (esta vez en serio)
La bajada el primer tramo con la nieve muy dura clavando bien los cantos y luego disfrutando de lo lindo.
Moraleja: si con sabuesos has de avanzar, ten en cuenta que poco vas a esquiar
Aqui la Tai: que bien me lo pase aunque tuve que subir esperando os todo el camino...que sois muy lentos!!!!
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