9 Enero 2014
Primer “tresmil” de esta temporada de travesía y digamos entre nosotros que no fue muy madurada y premeditada su ascensión, como tantas veces dejamos que “fluyera”, una cosa nos llevo a la otra y “chino chano” subimos a este monte injustamente relegado al ostracismo y olvido.
Si además lo combinamos con la vertiente de Saretas, a la subida o bajada, la sensación de estar en el lado salvaje y aislado del Pirineo es total.
Soy consciente de que esto no se debería comentar en Internet por sus consecuencias y te lo guardas casi como secretito, pero como esto casi no lo lee ni dios, voy y lo casco.
Interesante y documentada colección de fotos de Donato que realizó la misma ruta, el mismo día pero en sentido inverso.
-PICASA-
Las Focas Majaras, no necesitan programar su ascensión en esta parte del Pirineo; algo "siempre" recomendado en terrenos de alta montaña. Los majaras han pasado a ser algo más que deportistas. Aunque también usan linterna, pala, arva..., son parte de esta tierra. Sus cimas y sus laderas, llegan a ser más "el medio" que "el fin"; o sea, más que un deporte, lo que hacen es una forma de vida. No creo estar muy equivocado. Se os nota hasta en el hablar :-Do.
ResponderEliminarEahhh!!!. Muchas "cenquius". Inazio
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