El pasado sábado, y dado el elevado riesgo de aludes, tres focas majaras decidimos salir a arrastrar nuestras pieles por algún lugar seguro.
Objetivo secundario: Pa' rriba y por lo blanco, hasta donde lleguemos.
Objetivo prioritario: No ser carne de avalancha!
La cosa terminó en una subida desde el Molino (Cerler) hasta el Rincón del Cielo, ejercitando la orientación por los bosques de la derecha de las pistas. Allí arriba se hizo la hora de bajar, para evitar el atasco de los pisteros. Una gran jornada de formación para la aprendiz de foca Julia, muy majara ella.
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